Caminando hacia España 5.0

Luis Arroyo Galán-Inventor de la Telemática

En dos artículos anteriores he abordado la evolución de la Web, desde la Web 1.0 hasta la Web 5.0, y el desarrollo de la telefonía móvil, desde la 1G hasta la 5G.

Fusionando (Telemática) estas dos tecnologías (Internet), podremos catalogar el uso que de ellas se ha venido haciendo en nuestro país, empleando una terminología similar. Hablaremos entonces de España 1.0 hasta España 5.0.

España 1.0

La apuesta inicial por los protocolos OSI acabaría por eliminarse. Los plazos de desarrollo de OSI se alargaron más de lo previsto. A principios de los 90 únicamente se había consolidado la mensajería electrónica.

Las necesidades de las universidades y centros de investigación evolucionaron a pasos agigantados, por lo que la mayoría tuvieron que buscar soluciones en los protocolos TCP/IP, que, a finales de los 80, ya se habían consolidado como estándares de facto para la interconexión de sistemas abiertos, en detrimento de los protocolos OSI. 

Esta introducción de los protocolos TCP/IP en las redes de los entornos académicos y de I+D coincidiría con la evolución de sus sistemas informáticos. En los años 80 se utilizaba una arquitectura basada en grandes equipos centrales a los que se accedía mediante terminales. Diez años después se pasaría a la implantación masiva de la informática distribuida interconectada por medio de redes locales.

Cambio política de conexión

Estos cambios hicieron que en las redes académicas, se diera un giro en su política y se tomara la decisión de poner en marcha un servicio de interconexión de redes de área local IP con acceso a Internet.

La primera conexión plena desde España a Internet se produciría a mediados del año 1990, como un servicio experimental de RedIRIS que, a finales de ese año, interconectaba tan sólo cuatro centros: Fundesco, Departamento de Ingeniería Telemática (Universidad Politécnica de Madrid), Centro de Informática Científica de Andalucía y CIEMAT (Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas).

El uso de Internet en los años 90  comenzó de manera muy básica, con navegadores solo texto. Después surgió el protocolo HTML que hizo la página más agradable. Aparecieron los primeros navegadores visuales como Netscape e Internet Explorer. Era una web de solo lectura y el usuario no podía interactuar con su contenido.

El mercado estaba dominado por los primeros buscadores, portales como COMPUSERVE usado por los true-pioners en España, Yahoo, Altavista y Netscape.

España 2.0

Recogemos a continuación algunos datos publicados por el INE como resultado de su estudio: “Encuesta sobre equipamiento y uso de tecnologías de información y comunicación de hogares” Segundo semestre de 2005.

  • Má​s de 5,27 millones de hogares tienen acceso a Internet, un 6% más que en el primer trimestre de 2005.
  • Dos de cada tres hogares conectados a la red lo hacen por banda ancha.
  • El 48,6% de la población de 15 y mas años utiliza el ordenador y el 42,1% navega por Internet.
  • El 51,9% de los hogares dispone de algún tipo de ordenador, un punto más que seis meses antes.
  • Continúa la tendencia de sustitución del teléfono fijo al móvil.
  • El 34% del total de hogares españoles tienen acceso a Internet, frente al 32,6% del año anterior.
  • Tres millones y medio de hogares tienen conexión de banda ancha a Internet.
  • Más de tres millones de personas han comprado productos o servicios por Internet.

España 3.0

El informe anual sobre el desarrollo de la Sociedad de la Información (SI) en España, “eEspaña 2006” de la Fundación France Telecom España, concluyó que la situación actual en nuestro país es de avance asimétrico.

Los progresos en algunos de los parámetros analizados contrastaban fuertemente con la ralentización en la evolución de otros. Esto significaba que, aunque en general se había registrado un avance durante 2005 en materia de SI, éste seguía siendo insuficiente con respecto al crecimiento conseguido en los países de nuestro entorno.

El número de internautas avanzaba lentamente hasta el 41,1% de la población. Más del 60% de ellos se conectaba con Banda Ancha. La eAdministración avanzaba en su relación con las empresas pero se retrasaba en los servicios a ciudadanos.

Alta penetración de PC y Banda Ancha en las empresas, con escaso aprovechamiento de las aplicaciones ofimáticas y on-line. La telefonía móvil, habiendo superado el 100% de penetración, se consolidó como motor del sector TIC.

En 2006, España se alejó de los países más avanzados en SI en Europa, al pasar del índice 13 al 20, y sólo Italia tuvo una evolución peor en el continente.

España 4.0

A continuación vamos a presentar algunas de las conclusiones que aparecen en el estudio realizado por la Consultora Ro-land Berger con el patrocinio de Siemens, que tenia por objeto analizar el estado de la transformación digital en la actividad económica es­pañola.

El informe reveló que, sectores como Telecomunicaciones e Inter­net o Servicios Financieros afirmaban contar con los medios a su alcance para llevar a cabo la transforma­ción digital en un 91% y 86%, respectivamente.

En los casos de las empresas de Industria, Energía, Farmacéu­ticas o de Salud, menos de la mitad de sus representan­tes consideraban tener los medios suficientes.

Era especialmente significativa la percepción sobre el po­tencial de la digitalización en las empresas industria­les, donde una inmensa mayoría consideraba que su pro­ductividad aumentaría notablemente con un mayor impulso a la digitalización.

Actores principales

El estudio también estableció que los actores principa­les en el proceso de transformación digital debían ser: las empresas, como líderes del proceso; las asociacio­nes, como portavoces; y las administraciones, como soporte.

En concreto, para desarrollar el mercado, la UE debería crear un marco regulatorio alineado con la era digital, con un mercado digital único. La adminis­tración nacional también debería impulsar la inver­sión, potenciar la investigación y las capacidades digi­tales y continuar avanzando en la digitalización de la población.

Como consecuencia de todo ello, en el informe se proponía realizar una “llamada a la acción” para impulsar este proceso, basada en tres principios: abrir el camino, actuar juntos y crear un ecosistema de la digitalización.

Factores de resistencia al cambio

La resistencia al cambio resultaba ser el factor interno más importante, según un 22% de los encuestados, así como los costes, como factor externo, para el 21%. En segundo lugar, la falta de competencias y la ausencia de una oferta adaptada al mercado también eran consideradas como barreras para la transformación.

El informe comparaba las oportunidades que ofrece la transformación digital con el nivel de madurez digital de las compañías de los directivos españoles encuesta­dos. La diferencia entre ambas variables es lo que se denomina gap de penetración digital que, según los resultados obtenidos, en sectores como el de Salud al­canza un 77% y en el de Transporte un 75%.

Este gap de penetración digital ponía de manifiesto el margen de crecimiento de estos sectores, con respecto a las oportunidades que ofrecía la transformación digital, y el uso que se estaba haciendo de ella.

Una situación avalada por el reducido número de compa­ñías en España que contaban con una estrategia digital formalizada (38%), frente a la mayoría (62%) que no la tenían. Asimismo, el 26% de las empresas todavía no tenía formalizado un responsable del área digital y el 20% de las empresas no realizaba ninguna formación di­gital a sus empleados.

España 5.0

De las múltiples publicaciones que han ido apareciendo en los tres últimos años sobre el proceso de digitalización que España debe abordar de forma inmediata para no perder el tren, hemos escogido el informe elaborado por PWC y Siemens con el título:

“Claves e inversiones estratégicas para una España 5.0

De este estudio iremos entresacando la información contenida en el artículo publicado en EL ESPAÑOL por Alfonso Muñoz con fecha 28/04/2021

  • Este nuevo modelo contribuiría a elevar en diez años el gasto en I+D+i hasta el 3% del PIB, permitiría que circulasen en España 5 millones de vehículos eléctricos y reduciría drásticamente las emisiones contaminantes.
  • El impacto en el empleo sería sustancial: la recapacitación digital podría generar 220.000 nuevos puestos de trabajo hasta 2030, lo que cubriría, por ejemplo, la demanda existente de 20.000 especialistas en ciberseguridad.
  • La digitalización no sustituye a las personas, sino que cambia su rol y las libera de realizar tareas mecánicas“, señaló Miguel Ángel López, presidente de Siemens España.
  • Gonzalo Sánchez, presidente de PwC España, considera que “es fundamental apostar por la digitalización, especialmente en las pymes, que constituyen el grueso de nuestra realidad económica y que pueden aprovechar esta oportunidad para ganar masa crítica y afrontar los retos de nuestra economía.

En la presentación del informe, se anunciaron planes y actuaciones ambiciosas para conseguir elevar el peso del sector industrial al 18% del PIB y conseguir, en un plazo de diez años, que el 74% de la energía generada en España sea de origen renovable.

El estudio ahonda en la oportunidad histórica que España tiene ante sí para renovar su modelo productivo y hacerlo más resiliente y sostenible, gracias al impulso que supondrán los 140.000 millones de euros que la Unión Europea (UE) inyectará próximamente a través de los distintos mecanismos contemplados en el Plan de Recuperación y Resiliencia.

Un nuevo paradigma

Estas magnitudes ofrecen una idea del impacto que ha causado la COVID-19 en la economía y del ingente reto que supondrá superarlo y salir reforzados de la compleja situación en la que se encuentra la mayoría de los países. Ante esta encrucijada, el informe de PwC y Siemens hace un profundo análisis del tejido productivo español, de las necesidades como país y de los cambios y actuaciones que deberían adoptarse para utilizar, de la forma más eficiente posible, los recursos de los que se va a disponer.

Todo ese plan de actuaciones e inversiones daría lugar a lo que el estudio denomina la España 5.0, un modelo de país más sostenible y centrado en las personas, basado en una industria más digital y competitiva y apoyado en el desarrollo de infraestructuras más inteligentes y eficientes.

Esta España 5.0 requeriría de nuevos modelos de negocio, una necesaria integración de diferentes tecnologías digitales y una apuesta decidida por la creación de ecosistemas colaborativos. Una simbiosis que permitiría crear nuevas soluciones a los retos actuales y alumbrar un futuro prometedor.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *