Mi hijo Pablo, padre de mi nieto mayor y que reside en Marbella, después de leer mi artículo sobre el concierto de Año Nuevo, me envió el mensaje que reproduzco a continuación.
Concierto de Año Nuevo…Siguiendo la línea de las palabras de mi padre… la tradición continúa en la familia…
El año nuevo siempre fue un día especial en casa, me solía levantar antes que mis hermanos. Al levantarme olía a la loción de afeitar de mi padre y su colonia, allí estaba sentado frente al televisor con el concierto de año nuevo, luego venía el concurso de Saltos de esquí, otra tradición navideña. Aquel gusto por la música y por la música clásica de mi padre llegó a mi.
Teníamos un maravilloso plato de Bang and Olufsen, en el que mi padre pasaba horas escuchando música clásica. Ese gusto por la música lo heredé, y a los 7 años pedí unos walkman por Navidad para la sorpresa de mis padres y demás familia. Cuando podía ponía música en el tocadiscos, que estaba completamente prohibido. Pero disfrutaba de los discos de mi padre.
Gracias a esta infancia llena de música, hoy en día sigo disfrutando de la música clásica y por supuesto del concierto de Año Nuevo. No desarrollé el oído musical de mi padre, pero no se puede tener todo en la vida…